ISAGEN PROPIEDAD DE BROOKFIELD: UN EJEMPLO PARA EXIGIR CAMBIOS TRIBUTARIOS A NIVEL MUNDIAL
En 2016, el gobierno colombiano vendió su participación mayoritaria en la empresa energética ISAGEN a una filial del inversionista canadiense Brookfield. Esta venta representó la segunda privatización más grande en la historia reciente de Colombia y Brookfield adquirió más del 99% de la propiedad de la empresa.
CICTAR ha trabajado estrechamente con varios sindicatos locales en Colombia (incluidos los que representan a los trabajadores de ISAGEN y a los empleados de la oficina nacional de impuestos) y con la federación global de sindicatos de servicios públicos (ISP) para llevar a cabo investigaciones sobre los impactos de este proceso de privatización para los trabajadores y para los ciudadanos de Colombia.
El informe examina cómo, desde la venta, ISAGEN ha reducido inversiones, aumentado ganancias y parece haber utilizado amortizaciones de su deuda para distribuir ingresos a las subsidiarias de Brookfield en el paraíso fiscal de Bermuda, lo que resultó en menores pagos de impuestos y poca inversión en el fuerza laboral de la empresa.
Colombia enfrenta una crisis energética, con escasez de agua y energía, y el costo de la energía aumentando un 30,23% entre enero de 2022 y octubre de 2023. Mientras tanto, las ganancias de ISAGEN casi se triplicaron entre 2021 y 2023, y la empresa ha pagado más de más de COP 3,4 billones en dividendos sobre acciones, de las cuales el 99,7% está en manos de Brookfield. Los pagos de impuestos como porcentaje de los ingresos totales se han mantenido establemente bajos durante el período. Parece que la población colombiana está soportando el mayor costo de la energía debido a la crisis climática y el efecto El Niño, mientras Brookfield aumenta sus ganancias.
El patrón de extracción de ganancias y minimización de impuestos revelado en este informe no es nada nuevo. La investigación del CICTAR, incluida una investigación previa sobre el propio Brookfield, muestra que este tipo de comportamiento es común cuando los gobiernos ponen servicios públicos en manos de empresas impulsadas por ganancias privadas. Pero este ejemplo es particularmente preocupante al tratarse del Sur Global, donde las desigualdades ya son altas y existe una necesidad urgente de servicios públicos de calidad.
El informe concluye que se necesita mucha mayor transparencia para comprender los impactos de la privatización de ISAGEN y que, como estudio de caso, el ejemplo de ISAGEN revela la necesidad de una reforma mayor y más fundamental de las normas tributarias globales.
Los fondos clave se compartieron de antemano con Brookfield y al final del informe se proporciona una declaración completa de la empresa.